REDACCIÓN |
La apuesta de la ciudad por la sostenibilidad y la creación de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE), dio un paso en firme el pasado mes de octubre, ya que de las nueve empresas que optaban a desarrollar el sistema para controlar el acceso a la ZBE la adjudicó a la unión de empresas integrada por Tecnologías Viales Aplicadas Teva, S. L. y Tevaseñal, S. A.
El Consistorio trabaja para tener operativa y en funcionamiento a finales del año que viene la ZBE. Es el plazo máximo autorizado para cumplir con las exigencias fijadas por la Unión Europea para municipios con más de 50.000 habitantes, financiado al 80% el coste de la operación a través de los denominados Next Generation.
Ayuntamientos como el de Torremolinos o Benalmádena o Marbella, se marcan el reto de desarrollar estas medidas a lo largo de 2023 también.
Este plan de movilidad urbana sostenible tiene como principal reto reducir los vehículos, que según los datos municipales concluyen que por el espacio geográfico delimitado transitan a diario del orden de 203.000 vehículos. Con la Zona de Bajas Emisiones, a cinco años vista serán unos 183.150 los vehículos que transiten por la zona, dato que disminuirá a 172.975 en 10 años, y a 162.800 en quince años. Y ello traerá consigo una reducción de los efectos contaminantes en las arterias principales de la ciudad como la Alameda Principal, el Paseo del Parque, el Paseo de los Curas, el Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso y la Avenida de Andalucía, entre otros.
Con esta situación que pretende tener operativa el Ayuntamiento de Málaga a finales del año 2023, se añade el ambicioso Plan Litoral, que tiene como objetivo crear un espacio peatonal y verde desde la calle Córdoba hasta la glorieta de Cánovas del Castillo, junto al Hospital Noble.
El Plan que fue presentado por El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, el pasado mes de julio de 2021, pretende ser una de las actuaciones de mayor transformación urbana de la ciudad, que sumarán a la ciudad 65.000 m2 de espacio peatonal y zonas verdes. El Plan incluirá también el soterramiento del tráfico en el Paseo de los Curas para ampliar el Parque en 18.000 m2 y completar así la conexión peatonal con el Muelle Dos del Puerto.